Amplia Alianza: Histórica Línea Comunista
jueves, 8 de julio de 2010
Aunque esa formulación oficial sea de 1980, el concepto en cuestión ha formado parte del bagaje de nuestro Partido desde mucho antes; un ejemplo de ello es el «Frente de Liberación Nacional» (FLN) y sus fuerzas armadas (FALN), establecidos a principios de los años 60 en alianza con el MIR y ciertos sectores de la URD, así como con elementos de las Fuerzas Armadas Nacionales y de otras esferas del país.
«La Unidad Popular es para los comunistas una concepción estratégica. Pensamos que las clases y capas sociales (...) oprimidos por el imperialismo y sus aliados locales pueden y deben unirse para conducir a Venezuela por una vía capaz de conquistar para el pueblo el progreso a que tiene derecho. El PCV busca y considera indispensables las alianzas con los partidos y organizaciones coincidentes con esta política. (...) El PCV está consciente de que los partidos que designamos comúnmente como de la izquierda, pero también las bases y ciertos sectores de otras organizaciones, tienen aspiraciones de progreso y bienestar, y podemos acordar un programa común para el desarrollo independiente y democrático de nuestra economía.» Programa del PCV. (VI Congreso Nacional, 1980) |
Más aún, el concepto de la amplia alianza ha sido parte de la línea política de las y los comunistas de todo el mundo desde los propios orígenes de nuestros Partidos. En 1935, el VII Congreso de la Internacional Comunista (Comintern), bajo la dirección de Georgi Dimitrov, quien fuera su Secretario General desde 1934 y de cuya muerte se cumplen 61 años el próximo 2 de julio, aprobó como orientación general para todos los Partidos Comunistas del planeta la política aliancista del «Frente Popular», que ya había sido propuesta desde 1924 como línea particular para algunos casos específicos.
Fue en ese mismo VII Congreso que se produjo la admisión del PCV como miembro de la Internacional Comunista y, por lo tanto, como Partido Comunista oficialmente reconocido; de manera que la política de amplia alianza ha formado parte del ideario de nuestro Partido desde sus momentos fundacionales.
A lo largo de los años, este concepto ha variado de nombre en nuestros documentos oficiales, manteniendo su contenido; así por ejemplo el VII Congreso del PCV en 1985 usó la denominación «Amplia Conjunción de Fuerzas Democráticas y Progresistas»
Esa continuidad a lo largo de las décadas se debe a que la política del Partido Comunista, tanto en este asunto como en general, es producto no de antojos momentáneos ni decisiones voluntaristas, sino de la reflexión y la elaboración colectivas orientadas por el análisis materialista dialéctico.
En cada caso, el PCV ha estudiado el juego de las contradicciones activas en la sociedad y la correlación de fuerzas existente en cada circunstancia, y ha identificado la contradicción principal de cada momento. Como resultado, el Partido ha diseñado una línea política orientada a la construcción del instrumento más propicio y efectivo para lidiar con la contradicción principal en cada caso.
A lo largo de los años de la llamada «IV República», este procedimiento de análisis y decisión colectiva resultó en la identificació
La más polémica e incomprendida de esas construcciones fue la que en 1993, y por unos meses, nos llevó a apoyar el segundo gobierno Caldera. Para el PCV estaba claro que de lo que se trataba en ese momento era de contribuir a debilitar el ya mellado sistema bipartidista y abrir las puertas a otras posibilidades en el futuro cercano, y, pese a la incomprensión que todavía subsiste, la historia ha demostrado que la decisión del Partido Comunista también en ese caso fue la correcta.
Y en 1998, ese mismo procedimiento de análisis y construcción colectiva nos llevó a convertirnos en el primer Partido político que declaró oficialmente su apoyo a la candidatura presidencial de Hugo Chávez, dentro de una amplia alianza en alguna medida similar a la que se formó en 1993.
La composición de la alianza que continúa apoyando al Presidente Chávez ha variado desde entonces; algunos de sus componentes originales se han ido y otros se han venido desarrollando y han cambiado cuantitativa y cualitativamente.
Pero 12 años después, el PCV sigue firme en su apoyo al actual gobierno, y no por conveniencia momentánea, oportunismo o fidelidad automática al líder, sino porque nuestro análisis de 1998, ratificado por tres Congresos sucesivos, una Conferencia Nacional e innumerables Plenos de nuestro Comité Central, continúa señalando la necesidad de fortalecer la amplia alianza de carácter antiimperialista y antimonopolista, con el liderazgo del Presidente Chávez, como instrumento político imprescindible en el momento actual para seguir avanzando hacia la liberación nacional y la posibilidad de la perspectiva socialista.
Fuente: Tribuna Popular Impresa Nº 178